Esta segunda tanda de episodios amolda la segunda mitad del primer libro de Memorias de Idhún, y desde entonces mejora a nivel argumentativo. A la primera temporada le echamos en cara que pecaba de sobre-exposición y no obstante deseaban sostener demasiado bien ocultos los secretos primordiales de la trama, con lo que muy frecuentemente no acababan de engancharnos totalmente.